energía limpia En realidad, la gestión no acaba nunca, hace segui-miento de todos los com-promisos y, si surge algún problema, escucha las que-jas de la comunidad. Cada una es un mundo y de entenderla en su contexto depende que funcionen tanto las medidas durante la construcción como las sociales a largo plazo. Por ejemplo, en muchas zonas rurales se hacen planes de tráfico para no ocupar el único camino que usan los niños al ir a la escuela o una ambulancia si surge una urgencia. Garantiza ese uso y al mismo tiempo el transporte de gigantescas palas de aerogenerador. En otros lugares el reto es completamente diferente. “En España vemos una oleada de oposición a los proyectos renovables, sumada a nuevas exigencias regulatorias. Trabajamos con consultorías para enten-der dónde nace esa conflictividad, realizamos encuestas de aceptación social, campañas de comunicación y proyectos de reactivación econó-mica para responder a lo que piden gobiernos y comunidades. Somos flexibles, adaptativos”, apunta Blanca Álvarez de Toledo, del área Social en España. Las comunidades indígenas, especialmen-te protegidas por las legislaciones nacionales, requieren un acercamiento exquisito, com-prender su forma de ver el mundo o incluso posibles abusos anteriores que explican su des-confianza. “Un proyecto de energía renova-ble puede ser algo desconocido e intimidante para las poblaciones pequeñas, es necesario compartir con ellas un viaje de participación y colaboración”, explica Michelle Holmes, res-ponsable de relaciones con los grupos de inte-rés y las comunidades en Australia. el equipo es diverso, multidisciplinar, técnico, empático, analítico y comunicativo Pantalla anterior arriba, chicos y chicas de un centro de menores no tutelados en Cádiz participan en un campamento de verano socioeducativo. Pantalla anterior abajo, campaña de prevención de varios tipos de cáncer en México, con revisión médica especializada.