José Miguel Atienza Riera Director de la Escuela de Ingenieros Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y presidente de la Fundación José Entrecanales Ibarra. “La ingeniería está en el meollo de los grandes retos de la humanidad” No basta el talento, ni siquiera en la ingeniería civil, donde abunda y escasea a la vez. El talento se tiene que alimentar con conocimiento para renovarse al ritmo de los cambios. para Atienza, ese don humano y divino refleja un nuevo modelo de liderazgo. ¿Su definición de una buena gestión del conocimiento? Es el marco que permite, promueve y alienta estar siempre pen-diente y al día de lo que sucede alrededor, como tener ventanas abiertas al aire fresco. La definición es válida para cualquier tipo de organización. A menudo se usa “conocimiento” como concepto aledaño al de “talento”. Para mí, el talento es el nuevo oro en este mundo de cambios acelerados. En el ámbito de la ingeniería civil escasea, hay una verdadera batalla por él. Pero el perfil de talento que buscamos es aquel capaz de adaptarse y renovar continuamente sus cono-cimientos. Podríamos decir que es un círculo virtuoso de talento que demanda conocimiento que demanda talento... Ambos con-ceptos van indisolublemente unidos. ¿El talento se alimenta de conocimiento? Facilitar el conocimiento es una forma de cuidar el talento. Los programas de desarrollo de personas que tendrán que imple-mentar las empresas, aunque solo sea por supervivencia, han de basarse en el conocimiento. ¿Va calando la necesidad de formarse durante toda la vida? El paradigma ha cambiado. Eso de que te formas, te pones a tra-bajar y te olvidas de seguir actualizándote... no, ya no. La forma-ción continua se revela fundamental, y creo que eso lo está en-tendiendo todo el mundo. Lo que veo es que no hay un mercado maduro de este tipo de enseñanzas. Alguien quiere tener cono-cimientos de Building Information Modeling, por ejemplo, y ve un montón de actores que los ofrecen: universidades, academias, centros de investigación, empresas, plataformas... Tal avalancha y dispersión puede bloquear y provocar que al final no se opte por ninguna. ACCIONA y UPM tienen un programa conjunto de másteres internacionales en administración de proyectos, iMPA, con profesores de la universidad y de la compañía compartiendo cada asignatura. Es una fórmula de cooperación que funciona y estamos valoran-do replicarla en otras empresas. Han de ser grandes, eso sí. Una pyme no puede permitírselo. ¿Se podría ampliar a otras cuestiones como digitalización o sostenibilidad? Queremos meternos más en digitalización, generar conocimien-to más específico. Cuando estableces una relación de confianza, te atreves a probar cosas nuevas. ¿Escasea el talento en la ingeniería civil? Creo que hay que cambiar el relato y potenciar un mensaje que, además, es muy cierto: la ingeniería está en el meollo de los grandes retos de la humanidad. Da igual en el que pienses, des-carbonización, transición energética, agua... Detrás de cualquiera de ellos está el conocimiento técnico y el talento de un ingeniero. ¿Y para atraer talento femenino? No tengo una respuesta categórica, pero sí veo que faltan refe-rentes, y es responsabilidad de todos visibilizarlos. No me puedo creer que, a estas alturas, se organice una mesa redonda solo con hombres. Hay ingenieras de caminos al más alto nivel y capa-ces de abordar el tema que sea. El problema es que cuesta más encontrarlas porque, por inercia, tendemos a llamar a los mismos de siempre. ¿Defiende la colaboración por encima de la competición? Estamos acostumbrados a la competencia, es lo que nos ha he-cho fuertes, tampoco vamos a ponerla en el foco de lo malo. Pero creo que hemos de repensar la dicotomía entre competencia y colaboración. Si le entrevistamos dentro de cuatro años, ¿qué le gustaría contar? Que el ecosistema de la ingeniería civil, compuesto por universi-dades, empresas, centros de investigación e instituciones públi-cas, transmite un mensaje atractivo y emocionante a los jóvenes ingenieros. Les dice, alto y claro: Si cuentas con el talento y el co-nocimiento, tienes futuro, vas a ir para arriba, y vas a ayudar a re-solver problemas cruciales de la humanidad. derecho de réplica derecho de réplica En 2017, la compañía acomete una obra especialmente compleja: el puente de 1,36 kilómetros sobre el fiordo danés de Roskilde exige un sistema mejorado de pilotes, sellado y cimentación. Así, adapta el de losas prefabricadas para otro puente construido en Australia y desarrolla ad hoc el monitoreo topográfico para la ubicación de pilotes. Esa solución no muere al cortar la cinta de Roskilde. Se replica, amplía y mejora al adaptarse a siguientes megaproyectos como el premiado puente Cebú (Filipinas) y Pattullo (Canadá), que ya cuenta con su parque de prefabricados y tecnología de cálculo de cimentaciones. ¿El siguiente?